El Museo Egipcio de El Cairo o Museo de Antigüedades Egipcias, realmente denominado Museo Egipcio, se encuentra en El Cairo (Egipto), y custodia la mayor colección de objetos de la época del Antiguo Egipto; posee más de 136.000 objetos clasificados de diferentes épocas de la historia egipcia: Tinita, Imperio Antiguo, Imperio Medio, Imperio Nuevo, Tercer Período Intermedio, Tardío, Helenístico y Romano, sobresaliendo de otros museos no solo por la cantidad, sino también por la importancia de muchos de ellos. Más de dos millones y medio de personas visitan el museo anualmente. Se encuentra en el centro de El Cairo, en la plaza Tahrir. Fue diseñado en 1900 por el arquitecto francés Marcel Dourgnon en estilo neoclásico, inaugurándose en 1902.
La piedra de Rosetta, se encontro el 15 de julio de 1799 por parte de un destacamento militar francés, cuando un soldado la descubrió , un bloque de piedra granítica de unos 760 kilos, La pieza, es un elemento clave para descifrar los jeroglíficos egipcios.
El gobierno egipcio estableció el Servicio de Antigüedades de Egipto en 1835, principalmente para planificar la creación de centros arqueológicos y para impulsar la exhibición de los objetos adquiridos bajo la propiedad del gobierno.
La colección fue más tarde transferida a otro edificio en el Citadel. En 1858 un museo fue preparado en Boulaq para albergar las piezas coleccionadas por el arqueólogo francés August Mariette. En 1880 los fondos del museo de Boulaq fueron transferidos a un anexo del palacio de Giza de Ismail Pasha.
El actual museo fue construido en 1900 en estilo neoclásico, por el arquitecto francés Marcel Dourgnon.
Este museo alberga en torno a unos 120.000 objetos. Las piezas más destacadas de estos fondos son las momias de algunos de los faraones de la historia de Egipto desde la 18ª a la 20ª dinastía, objetos de las tumbas de los reyes y miembros de las familias reales del Reino Medio, famosos vestigios hallados en las tumbas de Tuthmosis III, Tuthmosis IV, Amenhotep III, Horemheb y la tumba de Yuya y Thuya.
Estas destacadas piezas son parte de una colección que junto con un grupo de 3500 restos arqueológicos procedentes de la tumba de Tutankamon, de los cuales el centro tiene expuestos cerca de 1700, convierten al Museo Egipcio de El Cairo en un centro de inevitable referencia.